El fotógrafo profesional nunca debe renunciar a su estilo personal en el trabajo siempre que cumpla las expectativas del cliente, siendo éste su principal y último objetivo.

Sus estudios universitarios se centraron en el mundo del marketing, disciplina creativa que poco tenía que ver con los trabajos posteriores en el mundo de la empresa. Empezó su andadura profesional como docente de formación profesional en materias administrativas como contabilidad y recursos humanos.

Con el paso de los años y otros trabajos, decidió que había llegado el momento de dedicarse a algo más creativo que le aportara tanto a él como a otras personas. Así transformó su pasión de hace muchos años por la fotografía en profesión. Se formó en la Escuela donde ahora es profesor, en la Escuela de Fotografía Apertura.

Así, en 2009 inició su actividad profesional centrada en la fotografía de reportaje y fotoperiodismo, y fotografía de arquitectura e interiorismo, principalmente. Compagina su trabajo profesional con la docencia en la Escuela, donde imparte clases en diferentes cursos y es coordinador del Curso de Fotografía Profesional.

No entiende su vida sin una cámara en sus manos. La fotografía es su pasión y su profesión, y compartirla es su forma de vida.

Considera que la fotografía profesional debe tener siempre un componente personal más allá de la técnica específica de cada disciplina, por lo que cuenta con diferentes proyectos personales desde el apropiacionismo hasta una fotografía de autor más personal.